La aventura más intensa en la que me he metido como diseñadora es aprender a dibujar correctamente para un proyecto en el menor tiempo posible.
La intención era realizar el logotipo de un proyecto #textil muy hermoso llamado #Malacate. Cuando conocí a las artesanas detrás de dicho proyecto y su poder, verdadera feminidad, fuerza y relatos de magia ⚡ sentí que mis capacidades aún eran muy cortas para expresar tal inspiración que sentí en el corazón y su vitalidad. Decidí aprender a dibujar y como loca me puse a ver videos y videos en YouTube, fue una experiencia hermosamente frustrante pues mientras más avanzaba más me daba cuenta de lo mucho, muchísimo que me faltaba por aprender, comprendí muy bien a Sócrates y el hecho de que "Mientras más sabes, más sabes todo lo que no sabes"
Tuve que aprender desde cómo hacer la primera línea que marca la expresión entera del cuerpo, geometrizar cada parte, entender los huesos, después músculos, después poses, hasta detalles complicadisimos como las manos y los pies,
Después unir tres cuerpos, hacer composición, (me inspiraba y enamoraba de muralistas como #Siqueiros Su forma de abstraer y geometrizar le dio todo un nuevo sentido y dirección a lo que estaba haciendo, me llamó sobre todo la atención la forma en que los cuerpos deben ocupar correctamente el espacio en base a la perspectiva, y me dolió también mucho la cabeza.
Lo intenté comencé a intentar yo misma, no sólo con el cuerpo sino con cada parte del mismo:
o el #Dr.Atl 🌻 que para mí es el #VanGogh mexicano) hacer perspectiva, hacer caras, hacer expresión de movimiento.
Me estaba volviendo loca, mientras más avanzaba más me daba cuenta de lo mucho que aún me iba a tardar y para cuando llegué al resultado final mi clienta estaba bastante desesperada (pues obvio) y prefirió no continuar conmigo. Aunque fue una lástima por el tiempo invertido y porque me gustaba el resultado, me sentí satisfecha, pues lo mucho, demasiado que aprendí con este proyecto y la seguridad que me dió para futuros proyectos fue inmensa y estaré siempre agradecida por la oportunidad y el caótico proceso y la frustración y la prisa que me hicieron entregarme plena, atrabancadada pero desafiantemente.
Parte de lo complejo era que debía funcionar como logo a una sola tinta y así poderse estampar en serigrafía artesanal y económicamente, yo estaba aún lejos de aprender a digitalizar y pensando que tardaría quizás 3 meses más, mejor decidí pedírselo a @queso.rayones quien entendió perfecto la visión y logró este fantástico resultado.
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