Recorrer el sendero del propio rio. Dar ánima, entonar una canción. Llamar a la que sabe, a la abuela, a lo mujer de los mil mundos, a la mujer de debajo de la tierra. Adquirir el recuerdo de la magia para hacer digestión y encarnar la posibilidad de transformación.

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Este video fue parte de la proyección BALADA ERRANTE en Buenos Aires como parte del programa Proyecto Imaginario.